Xoán Leiceaga Baltar

POESÍA

Gaudeamus de la flor [v]

Sois esculturas de vida, y abono de luz natural
inherencia y espejismos / colores interminables

policotiledóneas / manos reticulares y nerviosas
manzana salud y petunia arte / el brindis es multímero
o, monocotiledóneas / selectas de brazos largos
plátano crianza y lirio gracia / los convites son humildes

corola cielo, corola niña, corola sangre o sólo ruborosa
o, variaciones de corola / sol radiante o crepúsculo tropical

y también tropel de ranúnculos sois / veletas de oro
o hierbas belidas y centrífugas / y exuberancia de porte
y mentas aromáticas / de las dos caras, fértiles ellas
o dientes de león, cizaña / con lozanía, de vino y verdor

y diminutas con vivificancia, como poas de los prados
o enormes garrafas de narcótico / vivo estramonio

soledades erectas de fragancia / magnolias blancas
fusión a tope del cáliz y la corola / la noche de luz
o insurgentes defensoras / fulgor entre los albedríos
y ceremonial abierto / gladiolos de inflorescencia

ovario oculto, tímido ovario, ovarios de los descaros
ovarios accesibles de azucenas / o narcisistas del iris

sois escultura sólida / de pachamama
emperatrices del riego y la brisa / vivaz es la perpetuidad
sois la materia, sois la sustancia / sois las lluvias y las nieves
munificencia es la savia / y así sois luz del espectro.

Corona:
Nunca los ojos arriba, para admirar la elegancia
siempre el ego reclinado.

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