Blanco móvil
«.... voy conduciendo, la ventana abierta...»
JOAN MARGARIT
Cómplice cauta, de nuestra complicidad
¿por qué ese enigma
te convierte en un imán insuperable?
O en hechicera
o tal vez en cazadora, la diana
que me anula los seis grados de libertad.
¿Por cuál porqué me arrebatas, inmensa
de mi tierra y de mi mar?
¿Por qué provocas, esta sangrienta emersión
de mi poderosa tumba?
¿Te registras como jaula, o tal cual ave?
¿Acaso es una ficción, tu vuelo?
¿O acaso es raso
o es que eres vuelo de veras?
No sé si vuelas en tu alfombra de volar
ni si sorteas la fila de escollos, o de purezas
o si es que vuelas en mi lata de conservas
mas no sé si como nicho, o si manjar.
Y aunque suponga, lo cierto es que nada sé
tanteo, solo tanteo
si virgen crees en las rocas increíbles
o eres la cómplice cauta
de nuestra adulta inocencia.
O la versión anterior
¿Acaso?
«¿Por qué te cierras, ventana?»
Xoan Leiceaga
¿Tu vuelo acaso, es un vuelo de verdad?
¿Acaso es que no dispones
de caídas ni de riesgos, en tu alfombra de volar?
¿Acaso ofreces un nicho de libertad
o, mas bien, un nido para las itinerancias?
¿O acaso es que eres conversa
de las latas de conservas
o féretros de la resignación?
¿O acaso crees, en lo que yo ya descreo
dueña de la poderosa ingenuidad?
¿Por qué volando me extraes
de mi mar y de mis tierras, y de mi cuna
original?
¿Pero por qué, aún así
el misterio de la complicidad
te convierte en un fortísimo imán, que embruja
o tal vez en ese blanco
que al fin deroga, a mis seis grados de libertad?