De achuchones
«Abandonándose en la silla, ella
no muestra un indicio de sonrisa.»
Joan Margarit
Excitante es el rastreo, e inclusive casi todas...
beatas de oscura maternidad, té con azúcar y cura
sexo de vidrio, rosario con estampas de anorexia
y la escoba de volar entre inciensos celestiales
maquiavélicas del pedestal, cava y cuchilla
serpientes que nos arrastran a la orilla del abismo
finísimo vientre buitre con su don de someter
máquina árida que desprecia los ensueños
inventoras de la manzana sex, vino y bulimia
evitas encadenadas a la perpetua ambrosía
nocturna su adoración, látigo y fuego
y su frutal millonario en orgasmos
magdalenas sudorosas, gozo o ficción al contado
princesas más admirables que las del lujo
redentoras de las caspas e inhóspitas candideces
y falsamente acusadas de untar la luz de la cruz
e inmaculadas lolitas, frente a taludes marrones
o salomés, con su billón de seseras en la bandeja
y odiosamente acosadas por la santa hipocresía.
... e hipnótica la inmersión, siempre una a una.
O la versión anterior
Estrechables
«Contemplándose, dejándose ir
ella sonríe o simula.»
Xoan Leiceaga
Una por una abrazables, por poco todas...
santas no madres del todo, dulces con té
rosario al cinto más estampitas de grasa, sexo cristal
y escoba para volar por la azul irrealidad
ambiciosas de los podios, cabellera de pitones
pilotos que nos seducen hacia el borde de las fosas
fría finísima andorga con la ponzoña de docilidad
y siniestro criadero de los sueños de cinabrio
descubridoras de la manzana sexual, gula y licor
las evas precondenadas a la cadena perpetua
pero adorables, nocturnas y también diurnas
asistidas ciegamente por billones de eyaculadores
magdalenas científicas, arte y técnica
amargura de princesa, cerveza y pecado Visa
calumniadas de manchar la cruz de la grande luz
en redimiendo de tantas inhóspitas inocencias
y, ¡ay!, lolitas inmaculadas, textura de chocolate
o salomés, toneladas de cabezas en la patena
acusadas y acosadas pero las reinas de la excitación
... y hacia el abrazo con vos: reclamo puro o efectivo
el macho es inclinación, permanente exhibición.