Xoán Leiceaga Baltar

POESÍA

Ósmosis

«... como si la esperanza hubiese atravesado
la lluvia de la noche, oigo sus voces...»

Joan Margarit

¡Qué honorable es tu antesala!
Me desposeo, con desnudez me atavío
y silencioso en tu ser me sumerjo.

Brotas radiante del baño
convertida en terca luz
acurrucas tu recato en mi sangre
y te alzas hasta lo tuyo especial:
«Silencio, hazme el favor
acampa, ahora déjame a mí
pausadamente déjame
en la fruición de este sabio sofoco
que el calendario, prohibitivo
inconmovible nos hurta».
Y así, acurrucas tu pudor en mi piel
y te alzas a otro especial:
«Mi piel entera, desde este sólido ayer
respira impregnada en ti».

(Entonces tuve una igual inundación
hormigueos de pureza, y eternidad
como la primera vez que un recién
me agarró el índice con su manita.)

O la versión anterior

Candor

«Igual que si la ilusión se cumpliera.»

Xoan Leiceaga

Con esta piel me visto de desnudez.
Silenciosamente lento, te espero.
Iluminada, te veo saltar del baño
convertida en risueña calidez.
Ovillas tus pudores contra mí
y te adelantas con lo que tienes mejor
«silencio, te lo pido por favor
sosegadamente inmóvil
no te rebeles, déjame a mí
en la fruición de mis jadeos sagrados
que esta comedia nos vende tan caro».
Y de nuevo te adelantas
ovillada en otro tuyo especial
«todo mi aliento se instala
bajo el riego permanente de ti.»

(Y tuve entonces el mismo hormigueo
un diluvio de candor y eternidad
como la primera vez cuando un bebé
se agarró a mi índice con sus deditos.)

Volver