Xoán Leiceaga Baltar

POESÍA

Estrategia casi todo

«Los sabios siempre han negado valor
a la cultura y al desorden legal.»

Platón, o casi

El pajarraco es adicto a la falsedad
al aire falso, a los falsos diamantes y a los instintos fingidos
a ofrecerse como esclavo de las aves dominantes
a que sus judas objetividades linchen a lo natural /
así nacen sus iglesias, y así inamovibles sus devociones
y así se infectan, de ingenuidad, todas las brisas de cambio /
¡qué bien vuelan por el suelo los pajarracos!
escupiendo hostilidad, vomitando humillación.

Las palomas son ovejas, adictas a la rutina
engullen las hierbas sucias en el corral del pastor
las palomas son hormigas, adictas al hormiguero
no paran en el llevar su mies a la sierpe madre
las palomas son rodillas, adictas a quien no eligen
y cometen las virtudes que comulga el pajarraco.

Entre la broza de los pajarracos, incluso cerca del nido
germinan brotes, que a veces medran como palomo cagón
con sus alas inservibles, si se las muerden se rinden
y reptan aptos dichosos hacia su doma eficiente /
o yerguen yemas, que a veces crecen en aves rebeldes
que no disfrutan en el sopor clerical ni en esa infiel beatitud /
oh tristes sabios, en serie desahuciados de las tribunas
naturales triturados por lo sobrenatural:
escriben: mas no hablan, no pueden ni salpicar.

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