Grey 'Amigos de la ceguera'
«¡Qué áspera, qué dócil adolescencia
la de la ancianidad!»
Xoán A. Leiceaga
En este gélido infierno
cuánto habría de ser libre la libertad
los aires cultos que no han de ser
porque yacen en el cráter que han apagado
¿acaso es que nunca fuimos animal definitivo
nunca seremos?
¿nuestro límite es tal vez ese móvil horizonte? /
obediencia a la nevera, quemados ahí,
juguetes, fugitivos de la caducidad
y estimulados en la universidad de los grilletes
los seres domesticados desprecian al animal
y a las propias y lozanas certidumbres naturales
doctores tiene el amor a la crueldad
y expertos son en cegar los dos ojos de la luz
los suyos y los no suyos, todos tan suyos
así espolea la congregación
y así a los fieles devora
la humanidad se siente a gusto
con una sola salvaje excepción
el azaroso producto polar
generador de calor
que se escurre entre sus uñas, al arañarlo /
así, democrática, la humanidad se siente bien.