De fervores
Nos lo hemos dicho ya
con la grácil vulgaridad
que es tal como si
delicadamente
lo hubiéramos endilgado
en cúmulos terrenales de veces
me cuidas / te cuido
por pasatiempo
con apenas más /
u otra luz bien diferente
que reside en las rodillas de la devoción /
o el estilo radical
el de arrojarse desnudo sobre un agujero negro
ese ojo enorme de inmortal entrada
en la oscuridad del cielo abisal.
Resultó fácil
resultó grato de estudiar y engorroso de perder
ese oficio de bohemia doctrinal
ese que nos fue llevando
desde la siesta indigesta de la fe
al trampolín fervoroso con lastre de zambullirse.