Xoán Leiceaga Baltar

POESÍA

Daga bienhallada

«El coronel no tiene quien le escriba.»

Gabriel García Márquez

El espanto florece en su llaga, espesa lenta
germinación
en el vientre desventrado
de su latir.

Agoniza el coronel cuando lúcido ya acata
aún a regañadientes
que aquel grueso calendario
de su destino
está vacío.

Bienvenida a mi revés, al infalible venablo
con su aguijón de anestesia
que dulcísimo me acude
humanicida.

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