149
Los titubeos se adhieren a la escabullida sus cien mil veces.
El cincel es lo más hábil y granítico en la grieta.
La fuerza exhibe veloz su debillidad.
150
Tú, meteoro boreal entre las sumas auroras de la seducción.
Yo, otro prisionero más del estupor milenario.
Tú la polifonía, yo los aplausos.
151
La calma anhela los truenos y los relámpagos del temporal.
La tormenta es creadora de los rayos creadores.
152
Ayer fuimos congelados en el ofensivo lujo de dos jaulas separadas
y hoy nos revela el rebato orgulloso de la modestia
en esta cálida alcoba, suelo de tierra.