Xoán Leiceaga Baltar

POESÍA

REFLEXIÓN

Esta sección se me ocurrió con objeto de disponer de un espacio suplementario a OBRA pero más flexible, más abierto — al lector, sobre todo—, aunque siempre orientado a «la poesía y lo poético», y, más preciso, a aspectos como su sentido, la valoración de su calidad, la aproximación a otros poetas y poemas y a un amplio continuo de ideas y prácticas, además de reflexiones stricto sensu (homenaje o muestra de poetas bastante, apenas o nada conocidos u olvidados, entrevistas y ensayos sobre otras manifestaciones artísticas, recordatorios de poemas, frases o versos notables, etc.). Se debe entender que, naturalmente, los conceptos de poesía y poeta son para mí hermanos de magia o mago acerca del arte y el artista, y por ello tienen cómoda acogida en REFLEXIÓN.

[Ver más en VIDA y SAL / SALudo]

Reflexión 1

Abecedario de escritoras – Letra U

  1. Uceda Valiente, Julia (Poeta, profesora) (Sevilla, España, 1925)
    1) (Frase): «El poeta tiene que ser testigo del tiempo que vive y que puede narrar los acontecimientos de una manera más íntima. Hay hechos históricos acaecidos recientemente que me afectan y que no me dejan quedar impasible. Aunque hablar de realidades es complicado porque creo que existe también un momento de realidad cuando se está dormido.»
    2) (Frase): «Se pueden sentir emociones distintas ante hechos distintos o ante el mismo hecho. La emociones corren y forman un eco dentre uno mismo, sintiendo de una forma coherente. Es una forma de conocimiento distinto que se aproxima bastante a la filosofía.»
    3) ('La extraña'): «La fatiga è sedersi senza farse notare./ Cesare Pavese: 'Il vino triste'." // "Me levanté sin que se dieran cuenta / y salí sin hacerme notar. / Había estado todo el día / entre ellos, intentando / hacerme oír, / procurando decirles / lo que me habían encargado. / Pero el recado que me dieron / no era preciso. El humo, / la música, el ruido de las risas / y de los besos —estallaban / como las rosas en el aire—, / eran más fuertes que mi voz. Cansada / de mi trabajo inútil, / me levanté, / abrí la puerta / y salí del hermoso lugar. / Desde la calle / miré por la ventana: nadie había / advertido mi ausencia. / Caminé. Volví el rostro: / ninguno me seguía.»
  2. Ugresic, Dubravka (Escritora) (Kutina, Croacia, 1949)
    1) ('Libro/Poema'): «Sin gestión, la desgracia no es más que un mero fracaso.»
    2) (Frase): «Porque en mi tierra, en lugar de decir, como en el resto del mundo, que el niño "duerme como un ángel", se dice que "duerme como si lo hubieran degollado".»
    3) (Frase): «El mercado intelectualiza la trivialidad, los intelectuales trivializan la intelectualidad.»
    4) ('Libro/Poema'): «Perder el pasado es ta duro como descubrir, desde el exilio, que tampoco deseas regresar a él.»
  3. Ulítskaya, Liudmila (Escritora) (Bashkortostán,URSS, 1943)
    1) (Frase): «No me considero una feminista en el sentido que se suele asociar a este concepto. Puesto que por formación soy bióloga genética, soy perfectamene consciente de la existencia de varios parámetros naturales que en el sentido biológico excluyen la igualdad entre hombre y mujer: La igualdad de derechos jurídicos o políticos no es capaz de cambiarlo. Creo que la raíz de la cuestión no está en la lucha de la mujer por los mismos derechos, sino en establecer la colaboración y cooperación entre ambos sexos, siempre teniendo en cuenta su diferencia.»
    2) ('Sinceramente suyo, Shúrik'): «Shúrik ni de lejos es un típico hombre ruso. Realmente es el ideal de las mujeres que ha perdido la esperanza de organizar la vida privada, que necesitan el apoyo por parte del hombre, que, al fin y al cabo, necesitan atención y sexo. En Rusia, donde existe un cierto déficit de hombres, él resulta muy solicitado.»
  4. Umeko, Saito (Poeta) (Tokio?, Japón, 1978)
    1) ('Haiku'): «En mi palma / no hay nada. / Relámpagos en la noche.»
  5. Under, Marie (Poeta) (Tallinn, Estonia, 1883-1980)
    1) ('La pregunta'): «La fatiga è sedersi senza farse notare. / Cesare Pavese: "Il vino triste"." II "Vimos aquellas frutas, ya muy maduras, iluminadas / en la tibia débil luz del sol de octubre / que insiste rojo como la sangre, en su pleno crecimiento, / sin anunciar la llegada de las nubes del invierno. // Entonces, un soplo de viento mueve graves racimos: / y algunos de ellos rompieron, cayendo a tierra / sobre la hierba marchita, y luego, bajo las ramas / hojas de oro con sus frutas púrpuras yacen alrededor. // Mano a mano caminamos, unidos la cuesta arriba / y empujados por el mal tiempo de aquel viento caprichoso, / y ojo a ojo, ansiosamente, no preguntamos: // ¿y nuestro amor, húmedo y alegre rojo del presente florecer, / será arrasado por los vientos de la vida, devoradores, / o todo se caerá sobre el suelo de la tumba, al fin?»
    2) ('Éxtasis'): «Ah, quemaduras de vida terrestre, miríada de esplendores / que no puede destruir ni el riesgo oscuro de muerte. / Yo cedo, presa dispuesta a las alegrías; / nunca elegí pretendientes discretos. / Y al igual que los vaivenes de la ola glauca genera / la espuma del mar, así, mis sedas verdes caídas despliegan / su espuma, y tras la último jugada está el vacío, / y, cazados en el éxtasis, mis sentidos ya se rinden. // ¿Es igual que hace la flor caprichosa ante la luz, / el horizonte me atrae, con el azul, hacia el confín? / Mi cuerpo sufre también de esa tal debilidad y tal orden: / mis nervios vibran pasmados en el placer, / y yo secuestro mi vida de su último tesoro / como si al crecer mis días hubieran rebosado su medida.»
  6. Ureña y Díaz de León, Salomé (Poeta) (Sto. Domingo, Rep. Dominicana, 1850-1897)
    1) De 'Llegada del invierno'): «... // Pasa ligero, llega a otros climas / donde tus brumas tiendas audaz, / donde tus huellas de muerte imprimas, / que aunque amenaces mis altas cimas / y aunque pretendas tu cetro alzar, //siempre mis aguas tendrán rumores, / blancas espumas mi mar azul, / mis tiernas aves cantos de amores, / gala mis campos, vida mis flores, / mi ambiente aromas, mi esfera luz.»
    2) (De 'Ruinas'): «Memorias venerandas de otros días, / soberbios monumentos, / del pasado esplendor reliquias frías, / donde el arte vertió sus fantasías, / donde el alma expresó sus pensamientos //... // Lucha, insiste, tus títulos reclama: / que el fuego de tu zona / preste a tu genio su potente llama, / y entre el aplauso que te dé la fama / vuelve a ceñirte la triunfal corona. // Que mientras sueño para ti una palma, / y al porvenir caminas, / no más se oprimirá de angustia el alma / cuando contemple en la callada calma / la majestad solemne de tus ruinas.»
  7. Uribe Marín, Flor Alba (Poeta, ensayista) (Leticia, Colombia, 1943)
    1) ('Amantes'): «Ascendente marea creciendo en lenta fiebre / los amantes se buscan y enlazan dulcemente, / como árboles que avanzan, / cumpliendo su destino de incendiada epidermis. / De pie son dos espadas que luchan tercamente / por distraer la muerte, / tendidos son dos ríos fluyendo hacia el instante / que anula la sellada consigna del olvido. // Y si el mundo, impaciente, / se sale de sus goznes, estalla o se disuelve, / los amantes lo ignoran, apenas necesitan / el canto de su sangre, / su vida recobrada en húmedas batallas / y las pequeñas muertes en cada despedida.»
    2) ('Poema desolado'): «Ya se que existen otras penas / con más pavura y más complejidad, / pero este es mi dolor y a él me aferro, / no pregunten por qué. // Hace tanto que olvidé mi cédula de arraigo, / extravié mi equipaje, /el principio de lo que no pude ser. // Hoy vigilo este dolor de medio tiempo, / esta alegría de fiesta equivocada, / este lamento que engendró la mascarada. // Esta pena mía, tan estricta y honda, / se adiestra en lo nocturno y allí azuza / cabal remordimiento, hora perdida, / y alimenta la mítica alimaña de mis miedos.»
  8. Urquijo, Concha (Poeta) (Morelia, Michoacán, México, 1910-1945)
    1) ('Ya corre el corazón por este suelo'): «Ya corre el corazón por este suelo / como antes del remanso el agua impura: / aún lleva tierras en la entraña obscura / y pretende copiar la faz del cielo. // Van creciendo el dolor y el anhelo, / la corriente se turba y se apresura, / y es fuente el sedimento de amargura / más que las alas con que intenta el vuelo. // Si tendieras la mano solamente / y el agua temblorosa se aquietara, / ya, contemplando el cielo largamente, // ¡oh Deseado!, el corazón dejara / flotar sobre su sueño transparente / la divina belleza de tu cara.»
    2) ('Una mujer aureolada por sus cabellos'): «Tu rostro en tu cabellera / es el faisán en el nido; / Eros en la red ligera / de la sonrisa primera / detenido. // Es de Astartea el rostro aciago / sobre sus muslos de oro, / espantable fruto ¡Y mago! /entre las ramas de un vago / sicomoro. // Es luna en las arboledas / y chispa sobre la fragua / y es, con su temblor de sedas / un puñado de monedas / en el agua.»

Reflexión 2

ABECÉ de MUJERES POETAS – Letra U

Jael Uribe Medina.jpg

JAEL URIBE MEDINA - Vida y poemas

(Sto. Domingo, República Dominicana, 1975)

Reflexión 2

Con la primera versión de la sección Reflexión-2, continente y contenido, he procurado ser tímido —ineficaz es el exceso— para evitar desorientar a los improbables lectores con lo inestable o brusco. Así, estuve una buena temporada trabajando sobre entrevistas que llamaban mi atención, como Rojas y otros personajes de la poesía o del arte en general; después me surge una euforia tranquila hacia el maestro Gamoneda y le dedico un gustoso esfuerzo acerca de su sublime poema-libro Descripción de la mentira. Y conservando eso, con mucho más ya, bajo la estable colección que supera el mes de meses bajo el botón de Ir a reflexiones anteriores al final de Reflexión.

Mediado 2012, creí que era el momento de un nuevo derrotero, esta vez largo camino —parece que la sangre aguanta— y siguiendo la vía del abecedario, que ya sugería la propia Reflexión-1. Por otro lado, mi corazoncito me venía reclamando hacía tiempo una robusta dedicación a la mujer, la de melena poeta, para suavizar el excesivo defecto histórico y, a la vez, servir de reconocimiento a su valor y sus aportaciones en este campo de la creación. Y, naturalmente, para un agradecimiento especial a mis lectoras, que asombrosamente insisten.

Esa es la razón de que en julio de 2012 haya iniciado, como Reflexión-2, el ABECÉ de Mujeres Poetas, que de la A a la Z espero completar, desde una selección posible de autoras y textos. Para cada letra iré buscando lo que entienda más oportuno y accesible, desde la primera, Anna Ajmátova, y las sucesivas (ver Ir a reflexiones anteriores). Espero que la actual elección resulte óptima (mi preferencia es elegir poetas en español, pero algunas letras se resisten y además, más de una vez, me vencen las devociones).

Fuentes: Páginas varias de internet, entre ellas:
«www. es.wikipedia.org/wiki/Jael_Uribe»
«www.cinosargo.cl/content/view/735767/Poemas-de-Jael-Uribe-Medina.html»
«www.artepoetica.net/Jael_Uribe_Medina.htm»
«www.poetasdelmundo.com/detalle-poetas.php?id=6083»
«www.bligoo.com/explore/article/735767/Poemas-de-Jael-Uribe-Medina.html»
Selección y comentarios: Xoán A. Leiceaga Baltar

Vida de Jael Uribe Medina

Jael Uribe Medina (Sto. Domingo, Rep. Dominicana, 1975), posee el grado de Artes Publicitarias por la Universidad Autónoma de Sto. Domingo y, entre otros, tiene estudios de Relaciones Públicas y Comunicación Corporativa, y de literatura y arte, sea para adultos o para niños. Además de poeta, ejerce oficios de traducción, artes plásticas y diseño. Colaboró con el proyecto del National Writing Project en la Universidad de Plymouth (EEUU) en favor de profesores y profesionales de la enseñanza de la escritura. A su actividad como poeta añade la de narrarradora y ensayista.

Asiduamente participa con su obra en diversos países, en programas de televisión y radio, y en numerosos encuentros poéticos. En concreto, forma parte de varios movimientos y grupos, entre ellos es considerada iniciadora y líder de Mujeres Poetas Internacional (MPI), fundado en 2009, y tiene como meta la promoción de la labor de la mujer en este arte y la denuncia de la violencia de género; en el mismo sentido colabora en el Festival Internacional de Poesía “Grito de mujer” que, desde 2011, se realiza cada año en el mes de marzo y en diferentes países. Poemas y escritos suyos han sido acreditados con premios en concursos e incluidad en un buen número de antologías nacionales e internacionales, en algunas de las cuales también fue editora o coeditora.

Participación en Antologías

Antología Internacional de Poesía Amorosa (México-Perú-Ecuador, 2006) Nano-poemas, Proyecto Expresiones (Venezuela, 2010) Canto de sirenas (México, 2010) En Audio 7 Mujeres Una Voz (Círculo de Escritoras Dominicanas, 2010) Mil poemas a Pablo Neruda (Chile, 2011) Poemas a Cesar Vallejo (Ed. Voces de hoy, Perú, 2011) Poetas de la Era: 76 artistas y… - Volumen 1 (Ed. Santuario, Rep. Dominicana, 2011) La palabra Revelada/Revelada: El poder de contarnos (Nueva York, EEUU, 2011) Yo Soy Mujer (MPI, Sto. Domingo, 2012) Anónimos 2.0 (Festival Internacional de Poesía Cosmopoética (Córdoba, España, 2012) Mil Poemas a Miguel Hernández (España, 2012) 116 Poètes D’un Autre Monde Pour La Défense De L’écosystème Planétaire (Paris, Francia, 2013) Short and Twisted (Editorial, Australia, 2103) Sonetos Siglo XXI (República Dominicana, 2013)

DIEZ poemas de Jael Uribe Medina

Al cliché de las voces

En este lapsus de amarrarme el mujer
a la cabeza
apretarme las garras con engrudo
pintarme de barniz el abdomen
y despeñar desde de la boca
la impotencia.
En esta ira de vaivén con paso cansado
y esperanza detenida,
en la mágica levedad del pellejo
y el apellido femenino.

En el universo que transito,
que se difumina en la tierra
y las espigas que danzan en mi lengua
como olas coloridas,
me atrevo a espantar las grapas que aprisionan mi sombra
y la mantienen suspendida,
a arañarle las tripas al fuego
rostizando una a una sus chispas.
Y danzo desnuda
aferrada al silencio de mi espacio
al cliché saturado de la propia risa.
Me burlo del despertar de las voces
que redondas se encierran en si mismas.

Así es la vida…
…un retorno de todo, un regreso de nada
y una rueda que en lugar de pararse
gira.

Ámame siempre

Soy mujer,
no de hambres ni de angustias
ni de tripas encogidas.
No de aire en los espejos ni reflejo de la ira.


Soy de luz
no fragor de espinas
llevo en el vientre la aurora
y en mi sexo
las libélulas caminan.

Soy alborada
pecho blanco que lacta soles,
miel destilada del tiempo,
y renacer de la aurora dormida.

Soy sujeto
no objeto,
soy el verbo que se activa.
Me deshago en los instantes
con el beso del olvido
y renazco al son del alba
en la caricia.

Soy de amor prometido
y siempre:
yo soy,
yo soy,
yo
la VIDA.

Amando lo que no puedes tocar

Son las manos las que descifran el lenguaje del alma.
Son los ojos los que hurgan dentro del corazón.
Son las palabras las que saben el idioma del alma y no lo hablan.
Son los sueños los que atan la fantasía a la realidad cruel.

El amor se mira las manos y ve que nada le sirven.
Los ojos miran al corazón que se niega a sentir.
La boca pronuncia lo que el corazón no quiere decir.
Las realidades destructoras de fantasías y creadoras de sueños que no son.

El amor duele.
Los ojos sangran.
El cuerpo clama.
Las palabras enmudecen.
Los sueños se esfuman.
El corazón sufre.
La luz se apaga.

¿Cómo saber los oscuros secretos del alma, si las manos no pueden alcanzarla?
¿Cómo pueden las palabras devolver la vida y sanar al corazón si la boca calla?

Ignorancia

Qué profundo es el silencio.
Qué frías las gotas que bañan mi ciudad.
Qué agudo es el sonido del agua golpeando las hojas.
Qué hermoso es sentir que mi tierra al mojarse es bendecida.
¡Qué grito sepulcral retumba en mis oídos!
Es el clamor de cada sueno olvidado de cada alma que sufre,
de cada deseo anhelado.

Qué intenso es el frío infernal que se lleva consigo las esperanzas de un nuevo sol.
Qué gloriosa es la tranquilidad de mis días desde mi escondite,
en donde puedo escapar del frío, pero no de mi soledad.
¡Qué infinito es el cantar de mi tristeza!
¡Qué amargo es el fruto de la vid!

Qué inmenso es el cielo que hoy se viste de gris.
Frente a mis ojos no hay más que oscuridad,
En mi ventana no se asoman más que fantasmas de un pasado
al que ni yo ni mi tierra recordamos.
Qué dura soledad mora en el corazón del hombre,
en el corazón de mi tierra inocente!

Qué helados se han quedado los sentimientos
y qué tristes son las palabras que traen a mí sus mensajes de tal vez.
¡Qué nublado está en la profundidad de mi alma!
Ya no puedo ver más que grises y oscuros atravesando mis pupilas.
Tan sólo puedo plasmar mis huellas sobre la faz del suelo que adoro.

¿Qué más me queda ahora?
¿Qué más me queda por decir?
¡Qué cruel es la voz de la inconsciencia!
¡Qué profundo es el silencio de mi voz!

Llegará el silencio

Llegaré el día en que me vacíe de frutos
y me vuelque en la semilla
sin que la nada pueda llenarme.
llegará el otoño de los ecos
con la caída del alba
y me encontrará colmada de soles
con la boca errando en las palabras.
Entonces,
cuando el vientre de la tierra sea parto
cuando no haya caminos
cosidos sobre el agua,
cosecharé flores en la dermis de las cosas
alimentado fronteras
con el todo que me aguarda.

Loco

Que se cierren las puertas de las casas en tus caminos,
Que te miren con desprecio tus enemigos.
Que tu familia te abandone sin que lo hayas merecido.
Que en la miseria te veas sin un centavo en el bolsillo.
Que en medio de la calle duermas y que te carcoma el frío.
Que te abrume la locura y que hables sin sentido.

No importa lo que pase contigo.
Porque mis puertas y ventanas se abrirán de par en par para que vivas conmigo.
Si los compañeros te abandonan podrás contar con una aliada.

¡qué se mueran de envidia tus amigos!
Porque la mujer más bella te ha escogido.

Aunque te ignore la vida
En mis brazos estará tu casa
Tu hogar estará conmigo.

Si la pobreza te castiga
Dios nos proveerá el abrigo.
Jamás padecerás hambre mientras mis labios sean tu pan y tu vino
Y te sacies en el cuerpo mío.

Cuando te canses de andar por caminos polvorientos y escabrosos,
Búscame que yo tendré los brazos extendidos.

Si la locura te alcanza
Estarás loco de amor
Loco, de no querer estar conmigo.

Quizás alguna vez

Quizá no sea yo
la perla en la gota
la gota en aurora
el vaso en la boca
ni la sed.

Tal vez no sea verbo
ni canto destilado
ni rueda torcida en el camino de la sangre
ni agua de beber.

En algún lugar inconstante
donde el ave se quiebre
y nos encuentren las migas
con la lengua seca y los oasis sin fe.

Allí quizás, yo vuelva a ser la gaviota extendida
en sumidero de playas
bayas afiladas cortando las agallas
de quienes agonizan y mueren a falta de bien.

En algún momento en la penumbra
de esta boca agitadora de mañas y manías
hallaré mi hombro al descubierto
donde la fiebre lo alcance acabando de nacer.
Y moriré de bruces
apegada a la sombra de palabras sonrientes
en un laberinto de dóndes, cuándos y porqués.

Se detiene el mundo cuando pasas

Dicen que en tu voz
se detiene
el mundo
la armonía constante del eje indetenible
el alba deseosa de los cuentos cortos
y la incansable paciencia de las largas historias.

Dicen que el universo se posó a mirarte,
que un rayo purpúreo se trepó a tu vientre
y trasmutó el germinar de la tierra por los siglos de los siglos
que su trova cantó hasta donde termina el ombligo de los montes
trepándose en las montañas.
Allí donde la prisa es humo
y el tiempo es fragancia.

Te escondes

He mordido la gula,
la armonía reticente,
las notas desplegadas en los párpados,
esos lobos callados en laberintos que duermen.
Me he partido en uno sin ser dueto,
comido de las migas del aire sin pedazos de viento.
Soy vacío reclamando su espacio entre la nada
gravitante de la hambruna sin llenar el sosiego.
Soy asombro entre ojos
y mordida sin dientes.
Me camino el apellido con los brazos abiertos
y me encierro en las palabras
hasta aprender de memoria el nombre de la muerte.

Tras la sombra silente

...y Él le dice:
—Es hora...—
Y se levantan los aplausos,
se arrinconan los miedos,
se acicala el desorden
arrumbado tras el cuerpo
de una noche que muere.
Gravitando.
Sangrando
y luego siendo.

Y ella dice: —Calla,
¡Silencio!—
Aún no es tiempo.
Se suspenden los abrazos
se callan los besos revueltos
en la polvareda
y se persignan los desencuentros.

Entonces Él se marcha
recogiendo
sus pasos tras las huellas
inquietas.
Ella corre
perseguida de quebrantos
y se sacude
del pelo
la impotencia.

Ambos parten
callando sueños
tras caminos bifurcados
del mismo sendero.
Se abaten presintiéndose,
sometidos al adiós moribundo
que culmina en siempre.
Abrazados por el manto
de la misma noche
aunados a las sombras
en vaguedad inerte.

FIN de los poemas de Jael Uribe Medina

Xoán A. Leiceaga Baltar, 1 de Junio de 2014